El objetivo principal de
la educación es el logro de los aprendizajes, a partir de esa premisa debe
entenderse a la evaluación como todo un sistema vinculado a la planeación
didáctica (donde se encuentran inmersos los aspectos del programa que se
requiere que sean aprendidos, los aprendizajes esperados, los niveles de
desempeño, etc), puesto que debe develar si éste objetivo se está alcanzando, a
través de dos componentes: comprobar que se aprendieron los contenidos
planeados y además exponer las causas por las que se produjeron fallas, para
tomar decisiones pedagógicas en favor de la mejora del desempeño de los
estudiantes.
Santos Guerra fotografía
exactamente la realidad de la evaluación y la presión que ejerce la autoridad
para recabar calificaciones en periodos determinados, puesto que este no es el
objetivo principal de este proceso, pero se le otorga demasiada importancia;
“una calificación no demuestra nada si la evaluación no fue auténtica”, yo le
añadiría dinámica y permanente. La
evaluación auténtica se fundamenta en el hecho que existe un espectro mucho más
amplio de desempeños que el estudiante puede mostrar a diferencia del
conocimiento limitado que se puede evidenciar mediante un examen. Este espectro
más amplio debería incluir situaciones de aprendizaje de su propio contexto y
problemas significativos de naturaleza compleja, que no se solucionan con
respuestas sencillas seleccionadas de una batería de preguntas. Aquí nos
encontramos con la disyuntiva: sobre que contenidos evaluar, los conceptuales
que se refieren a “el saber”, relativo a hechos, conceptos y principios; los procedimentales
que se refieren al “saber hacer” o a los actitudinales relacionados a los
valores, las normas y actitudes; Monereo
(2011) en su tipología de saberes da cuenta con toda razón, la importancia en
los centros escolares, de los saberes conceptuales en los distintos campos
disciplinares, por la facilidad de su evaluación, pero estos no son los únicos,
también los procedimentales tienen sus fallas puesto que en las escuelas solo
se les da importancia a los 2 primeros aspectos: al conocimiento factual de los
procedimientos y al inicio del procedimiento, descuidando aspectos relevantes
como la automatización y el perfeccionamiento, que se desarrollan en mucho
mayor tiempo, pero que dan cuenta del dominio experto del saber hacer. Luego entonces siendo nuestra
evaluación de un enfoque basado en competencias tenemos que evaluar los tres
tipos, puesto que son los que tiene que movilizar el estudiante para demostrar
sus capacidades; para tal consideración según
Perrenoud (2007), se requieren tomar 3 medidas: limitar la cantidad de
conocimientos, diseña actividades basadas en situaciones problemáticas y la
integración de la evaluación al proceso de enseñanza aprendizaje como un todo.
Las
propuestas actuales de evaluación abogan, por una evaluación que incluya,
además del conocimiento, más información sobre su desarrollo educativo que
permita a los docentes, entender el proceso de aprendizaje y monitorear el
progreso, con el fin de establecer una cultura de evaluación en el aula
(Airasian, 2000). Por lo que para verificar que la evaluación sea genuina se
dispone de tres funciones de este proceso y que se pueden realizar en
diferentes momentos: la evaluación
diagnóstica que cumple con la función de proporcionar información sobre los
saberes y habilidades previos de los estudiantes, la cual es realizada al
inicio del proceso de enseñanza aprendizaje (bloque, tema, actividad, etc.);
este tipo de evaluación permite hacer las adaptaciones curriculares con
base en las características y requerimientos de los estudiantes, para proponer
actividades de apoyo o realizar las modificaciones pertinentes en cuanto a
estrategias de enseñanza, que den solución a los problemas detectados. La evaluación
formativa que se encamina a recolectar información a lo largo del tiempo y
permite la detección de logros, dificultades y la retroalimentación al
estudiante, así como proporcionar al docente la información necesaria para
realizar las adecuaciones en sus estrategias de enseñanza. Esta evaluación se
realiza durante todo el desarrollo del proceso de enseñanza aprendizaje.
Finalmente la evaluación sumativa
tiene el propósito de verificar el grado de logro de aprendizaje de los
estudiantes, a través de la
obtención
de productos terminados; este tipo de evaluación se realiza al final del
proceso de enseñanza aprendizaje.
Así mismo dentro de la
evaluación formativa se presenta la oportunidad de que este proceso no sea sólo
responsabilidad del docente (heteroevaluación), también de otros agentes que
pueden intervenir para valorar su propio desempeño (autoevaluación), así como
también emitir juicios de valor del desempeño de otros compañeros
(coevaluación); éste tipo de ejercicio permite a los estudiante tener una
visión global de su proceso de aprendizaje basado en criterios establecidos
desde un inicio, verificar sus avances e identificar aquellos puntos en donde
es necesario mejorar; debiéndose lograr en un ambiente de respeto mutuo dentro
del aula. Algunos de los instrumentos con
los que pueden realizar estos tipos de evaluación son: las listas de control y
las escalas de valoración. La Autoevaluación y la Coevaluación se realizan al
final de un trabajo realizado, la Heteroevaluación puede realizarse además,
durante el proceso de enseñanza aprendizaje.
Se debe tener claro el
propósito de la evaluación, que si bien al final se debe otorgar una
calificación, porque así lo exigen las autoridades educativas, éste proceso no
es para castigar o etiquetar a los estudiantes, sino para darles una
oportunidad para mejorar. Por lo tanto cambiar el paradigma en cuanto al
proceso de evaluación, resulta indispensable si queremos que nuestros
estudiantes se sientan motivados a aprender y logren las metas que queremos que
alcancen. Recordemos que nuestra materia prima son seres humanos con
sentimientos y emociones, con cualidades que los hace valiosos y que si bien
pueden cometer errores y encuentren obstáculos, está en nosotros la posibilidad
de lograr que los superen.
BIBLIOGRAFÍA
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Auténtica: Un Sistema para la obtención de evidencias y vivencias de los
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